top of page

Prácticas taoístas en un mundo en crisis



Mis queridos y queridas estudiantes del desarrollo de lo esencial supremo!


Qué privilegio liderar a un grupo de tan elevado propósito. Al liderarlos a ustedes, yo también soy liderada por cada uno de ustedes, que me inspiran a dar lo mejor de mí.


Llevamos años preparándonos para este dramático punto de inflexión, en el cual el mundo orientado y sostenido para estar a resguardo, se viene abajo, desaparece, en un abrir y cerrar de ojos. Este momento podemos usarlo como una gran oportunidad para fortalecernos, atravesar la tormenta y poder ser parte de todo lo nuevo que surgirá de esto. Fin del mundo conocido. El comienzo de uno que hemos soñado todos.


Años practicando sobre el concepto de generar un espacio en nuestro interior, desde el cual podamos resistir, como en el ojo del huracán, todo el caos del mundo exterior. Ese centro vacío está en nuestra consciencia y sin embargo, está más allá de la consciencia, porque ese ojo puede observar el contenido de nuestra consciencia.


Nuestras prácticas taoístas integran la filosofía del Tao, no como concepto, sino como una experiencia. Cuando practicamos Chi Kung, Tai Chi o Meditación Taoísta, desarrollamos esa consciencia que observa desde el Tao Eterno, nuestro Tao Humano. El Tao Humano es dual, en permanente cambio, yin yang: bueno malo, más menos, oscuro luminoso, carencia abundancia, vida muerte. El Tao Eterno es estable, permanente, pleno. Ambos estados están presentes en cada ser humano. Esta capacidad de ser parte consciente del Tao Eterno, la vamos desarrollando siendo responsables y creativos, diferenciándonos de los otros seres vivos, que sólo pueden reaccionar ante la contingencia mediante la huida o el ataque.


Este es el momento de recoger toda nuestra inversión y ponernos a practicar lo aprendido, para salir del pánico, del estupor, de la idea de que somos víctimas de algo que nos supera. No importa las limitaciones que tengamos. El Espíritu (Voluntad, Intención y Decisión), es superior a la Energía (todas las emociones, pensamientos, juicios, opiniones, actitudes) y al Cuerpo (sano, joven, enfermo o viejo). Cuando el Espíritu manda, lo demás está bien. El espíritu, la consciencia, el amor, (lo Esencial Supremo) será Lo que nos permita atravesar este momento caótico. Recordemos que el miedo es lo opuesto a la vida, lo opuesto al amor, lo opuesto al espíritu. La práctica nos saca del miedo y nos ubica en ese espacio eterno, que está al centro del huracán.


Y saber que si estamos conscientes, somos los dueños de nuestro cuerpo, de nuestra energía, de nuestra mente y ningún virus, bacteria, parásito, puede alojarse en esta casa que tiene al dueño o dueña presentes!

Una cosa es el miedo y otra, la prudencia y la responsabilidad. Tenemos que tomar acción responsable para cuidarnos y cuidar a otros, pero que esas acciones estén inspiradas en el amor y la compasión, en la solidaridad y la confianza que siempre el futuro es mejor, que la evolución es imparable y que en última instancia, vinimos a experimentar el tao humano para evolucionar.

Ahora que estamos sin poder juntarnos para hacer nuestras prácticas, empujémonos para hacer los ejercicios, sintiendo que estamos vivos. La cabeza nos separa de la Vida.


Mientras haya vida, hay esperanza! Y lo esperado, se hace realidad con voluntad y determinación.


Trinidad Fariña V.

Directora Escuela Tradicional de Tai Chi y Chi Kung.

Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page